Te enseñamos como preparar un asado de manera fácil, un pollo al horno rostizado en casa, la receta de pollo con limón y patatas. ¿Te apetece?
Alitas de pollo al ajillo
Información de la receta
- Para 4 comensales
- 540 Kcal. por ración aproximadamente
- 30 minutos
- Aperitivo / Tapa
- Segundo Plato
- Económica
- Ver receta
Receta de Alitas de pollo al ajillo
Una receta clásica y típica española que hoy, vamos a preparar de forma muy sencilla. Las alitas de pollo al ajillo son de esas recetas que nunca faltan en casa. Se trata de un plato nutritivo que a la par es bastante económico y sabroso. Ya con esas condiciones, no tendremos excusas para no ponernos manos a la obra. Si seguimos bien los pasos, obtendremos una carne sabrosa y jugosa.
Aunque muchos también cambian las alitas por la pechuga o el muslo del pollo, la primera puede quedar un poco más seca y el segundo, lleva más tiempo de cocción. Si es que, se miren por dónde se miren, las alitas de pollo al ajillo son un plato al que todos le otorgarán una buena nota. También puede contener ciertas modificaciones pero la sencillez no es una de ellas.
Ingredientes para cocinar Alitas de pollo al ajillo
- 20 alitas de pollo
- 9 dientes de ajo
- 1 cucharadita de orégano
- 1 vaso de vino blanco
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Como preparar Alitas de pollo al ajillo
- Primero salpimentamos las alitas de pollo y reservamos.
- En una sartén, colocamos los ajos con un chorrito de aceite a fuego muy suave y durante unos 3 minutos.
- Retiramos los ajos y colocamos las alitas en la sartén. Tendremos que freírlas por ambos lados hasta que las veamos doradas.
- Echamos el vaso de vino blanco y esperamos un par de minutos hasta que se reduzca.
- En ese momento, volvemos a añadir los ajos que habíamos retirado. Les damos un par de vueltas y quitamos de nuevo.
- Cuando ya los sabores se hayan integrado, añadimos el orégano y tendrás listas tus alitas de pollo al ajillo.
Consejos del chef
- Hay que prestar especial atención a los ajos. Cuando los echamos por primera vez en la sartén, el fuego tiene que estar suave. No queremos dorarlos ni cocinarlos, tan solo que desprendan ese aroma que tienen y se integren con las alitas posteriormente.
- Si quieres que las alitas tengan un rebozado crujiente, antes de añadirlas a la sartén, pásalas por harina.
- Para dorar las alitas y que al mismo tiempo se hagan por dentro, recuerda no subir mucho el fuego.
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